FÉLIX ALBO - Cuaderno de viaje

Monforte del Cid es una población de esas que quedan al lado de mi cotidiano pero nunca le prestas la suficiente atención. Incluso la he atravesado desde la autovía, dirección a Aspe, pero nada, ni siquiera me había fijado en sus casas, cosa que no suele ocurrir.

Hoy tengo la oportunidad de contar en su instituto que lleva el mismo nombre que la población: I.E.S. Monforte del Cid.

El centro es muy nuevo. Se nota por el estado de sus instalaciones y por su diseño arquitectónico. Aprovecha mucho la luz y tiene un patio enorme. Lo único, que sus árboles, por su temprana edad, no dan la suficiente sombra para albergar a la adolescencia bajo su frescor, pero oye, no se puede pedir todo.

Tengo tres sesiones esta mañana. La primera para los primeros de E.S.O. y nos lo pasamos bien. La verdad es que con el cuento de "El otro lado del árbol" de Mandana Sadat, se engancharon al ritmo y a eso de "escuchar historias".La segunda, para los segundos de E.S.O. Aunque parezca mentira, había cosas que habían cogido los de primero y a los de segundo les costaba más. Aún así es un grupo gracioso que están, más que otra cosa, sorprendid@s. Al final lo pasaron bien, según sus propias palabras. Una alumna había leído el libro del que había sacado uno de los cuentos, pero no lo reconoció hasta que nombre la obra y su autor. Eso me agrada.
El tercer grupo no es tercero de la E.S.O., sino segundo de bachiller. Todo un goce de sesión, con un ritmo más rápido, con más agilidad para las evocaciones, las ironías, las imágenes y los juegos de palabras. También más atención y, como el grupo lo puso todo, yo también.

Me marcho de Monforte con la necesidad de pasear por sus calles, tranquilamente, y detenerme en sus casas, sus balcones y sus calles.

Ya nos veremos. Saludos y gracias.